Siempre me embeleso con la luz del amanecer, es sorprendente ver como el paisaje evoluciona de los tonos azulados hasta el naranja intenso, como la luz suave de las primeras horas del día inundan los paisajes añadiendo volumen a las formas.
De reojo observo la luz mientras conduzco y no puedo evitar parar en la cuneta y sacar mi cámara.
Amanece en la Pedriza |